EL NUEVO SIGLO: El presidente Gustavo Petro estuvo en Córdoba, ¿escuchó los planteamientos del gobierno departamental?
ORLANDO DAVID BENÍTEZ MORA: Cuando nos hacen la invitación por parte del Gobierno nacional, como mandatario regional lo tomo con positivismo. Es una oportunidad para articular esfuerzos, para plantear problemas y buscar soluciones.
En el marco de lo que el Gobierno Nacional denomina “Gobierno Escucha”, concurrimos con la intención de insistir y persistir en lo que nos une y desistir de lo que nos divide, tal y como lo planteaba el pensador Camilo Torres.
Más, sabiendo que se tiene hoy la oportunidad de contar con un presidente de origen cordobés, lo que se desea es poder tener soluciones estructurales a problemas históricos.
Lamentablemente, en “Gobierno Escucha” el Gobierno no escuchó la voz del mandatario de Córdoba, ni la de los alcaldes presentes. No hicimos parte del orden del día, y al solicitar formalmente la palabra, tampoco me la otorgaron.
Creo que no son actos de un demócrata impedir que las voces planteen alternativas.
En este tipo de espacios de reflexión, lo que debe primar es ser escuchado, proponer, plantear y trabajar articuladamente.
ENS: ¿Qué hubiese planteado durante el encuentro de haber tenido la oportunidad?
ODBM: Quería decir, por ejemplo, que hay deudas pendientes producto de los acuerdos de paz con Córdoba, a los que no se les han dado cumplimiento. Solicitamos, no solamente tierras, para los campesinos sin que haya expropiación, sino elementos para que exista una verdadera inversión, que haya posibilidad de transformación, que haya garantías de una educación superior a través de un acompañamiento real, articulado con el departamento y municipios.
Quería decir que una forma de saldar las deudas sociales es otorgando la posibilidad de participar en las utilidades de las empresas públicas que hay en la región como Urrá o Gecelca.
Urrá generó el año pasado cerca de 100.000 millones de pesos de utilidad. Eso nos ayudaría mucho a solucionar problemas de salud, de educación, a los indígenas y campesinos.
Queríamos decirle, como se lo manifestamos desde el primer día, cuando hubo el primer encuentro en el marco de la cumbre de gobernadores, que queremos que al presidente le vaya bien. Si al presidente le va bien, a las regiones les va bien.
Desconexión
ENS: ¿Esto quiere decir que los mandatarios que están a punto de culminar su gestión, terminarán con desconexión del Gobierno nacional?
ODBM: Creo que la desconexión debe ser explicada producto de una falta de interlocución o entendimiento, a pesar de contar con la voluntad de parte de los gobernantes en su mayoría a nivel local.
Creemos que esa situación podrá ser distinta con los alcaldes y gobernadores que serán elegidos en las próximas elecciones.
Pero creo que se desaprovechó, desde el mismo momento que el presidente Petro fue elegido, hace casi un año y medio, todo el avance que teníamos en los territorios; es decir, el diagnóstico claro de los problemas, los proyectos estructurados y la voluntad de apropiar recursos para responder al clamor popular.
ENS: ¿Qué le dijo este jueves el presidente de la República hablando de gobernante a gobernante?
ODBM: A pesar de estar tan cerca en la misma mesa, estuvimos lejos. No pudimos tener, sino el saludo de bienvenida y el saludo de despedida. No hubo interlocución como tal.
Esperábamos obtener la palabra. Fui sabiendo que era un escenario difícil, con el riesgo de ser politizado por lo que representa hoy Montelíbano.
Desafortunadamente, nuestras voces no pudieron ser escuchadas, pero esperamos más espacios. Afortunadamente, los medios de comunicación nos permiten hoy transmitir el mensaje de voluntad política y compromiso social.
Elecciones
ENS: Faltan pocos días para las elecciones, ¿no le preocupa que el gobierno esté respaldando candidatos en los diferentes departamentos?
ODBM: Córdoba tiene 30 municipios, hubiesen podido hablarse de la subregión de San Jorge, sur de Córdoba o todo el departamento con la problematización: hablar de la sabana, del alto Sinú, del bajo Sinú, pero no.
Se habló de Montelíbano y creo que hubo más promesas de parte del presidente que acciones reales y proyectos concretos.
ENS: Es decir, ¿usted estuvo convidado de piedra?
ODBM: Fui cumpliendo mi compromiso y responsabilidad como gobernante, como debe ser cuando se tiene al presidente en su territorio. No me parece cordial no concurrir. Esperé que en el marco del “Gobierno Escucha”, nuestra voz hubiese sido escuchada para ayudar en las soluciones. Pero, desafortunadamente, fui a hacer de testigo y no a participar de las reflexiones, de las proposiciones y de la construcción de un mejor departamento y un mejor país.
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