Lograr que el campo sea más productivo y darles tierras a los habitantes de las zonas rurales que requieren producir están entre las metas del huilense Gerardo Vega, nuevo director de la Agencia Nacional de Tierras, quien considera que hay un atraso en los cumplimientos del acuerdo de paz.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cuáles son sus metas principales?
GERARDO VEGA: Hay que hacer un cumplimiento de metas del orden nacional, que tienen que ver con el acuerdo de paz, con relación a las tres millones de hectáreas que se acordó entregar a campesinos que no tienen tierra, siete millones de hectáreas en formalización y desde luego contribuir bajo el liderazgo de la ministra y el Presidente con el catastro multipropósito.
ENS: ¿Cómo se entregarían?
GV: Hay varios mecanismos. Un fondo de tierras, las tierras baldías de la nación, lo que existe en la Sociedad de Activos Especiales (SAE), con quienes ya se está mirando la disponibilidad que hay con compra de tierras. Esas son las fuentes que ha tenido el Gobierno y que ha diseñado el Presidente para adelantar ese propósito. Hay que recordar que Colombia tiene 114 millones de hectáreas, 20 millones de ellas donde es posible producir alimentos, y eso es lo que requiere el país.
ENS: ¿Cuáles son las zonas en las que se han enfocado?
GV: Se han diseñado varias zonas en el país. Primero hay que atender los 170 municipios PDET y desde luego todas las zonas del país pueden solicitarlo cuando así califiquen para tener nueva tierra o cuando tengan tierra insuficiente, o también por medio de la restitución, para quienes perdieron la tierra con motivo del conflicto armado.
ENS: ¿Hay un incumplimiento de los acuerdos de paz?
GV: Hay un atraso evidentemente, hay unas metas incumplidas, unos indicadores que son muy bajos, sobre todo en este punto de tierras, y el Gobierno nacional tiene que actualizar esas metas, el cumplimiento de esos acuerdos que ayudan realmente a buscar una paz duradera para Colombia.
ENS: ¿Cómo lograr que los hijos de los campesinos sigan la vida en el campo y no lo abandonen?
GV: Eso se debe a que el campo ha estado completamente olvidado y no les ofrece alternativas a las personas que lo habitan, a los campesinos y las comunidades indígenas, y creo que una parte de ello está ligado al conocimiento y a las posibilidades de conexión de internet para que haya mayor información, más conocimiento y sobre todo para el desarrollo de la agroindustria. Si no se hace así, no será posible la transformación, que está íntimamente ligada al desarrollo tecnológico con la posibilidad de que el campo avance.
ENS: ¿Usted perteneció al EPL?
GV: Yo pertenecí a ese movimiento insurgente hasta 1991, cuando se hizo el acuerdo de paz con el presidente César Gaviria, se hizo un acuerdo de paz y desmovilización. Yo soy abogado y hace 30 años se hizo el acuerdo de paz. Estaba en Urabá, en la región de Turbo, Arboletes, en esa región del país; milité en esa organización siendo abogado. He estado en mi vida laboral en varias actividades públicas: estuve como consejero presidencial, luego como secretario de gobierno, alcalde encargado del municipio de Apartadó, fui diputado por la Asamblea Departamental en Antioquia y tuve la oportunidad de estar como cónsul de Colombia en Bélgica y en el principado de Luxemburgo durante varios años.
ENS: ¿Cree posible la paz?
GV: La paz vale completamente la pena. Los acuerdos de paz hay que respetarlos, hay que cumplirlos. Colombia tiene que transformarse, tiene que dar oportunidades a la mitad del país que no las ha tenido y creo que eso es importante cumplirlo. Hoy existe la posibilidad de adelantar una paz total, como lo ha dicho el Presidente, con organizaciones disidentes de las Farc, con el Eln, para que Colombia salga del ciclo de violencia y pueda transformarse en un país en desarrollo y con crecimiento económico, que salga de la pobreza, de las dificultades y de la exclusión.
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