El canciller designado, Álvaro Leyva, al termino de su reunión con la Nunciatura Apostólica al Norte de Bogotá, habló sobre los procesos de paz que se va adelantantar con el Gobierno electo y explicó la diferencia entre el sometimiento y el acogimiento que tendrán que hacer las bandan criminales que se sumen a este proceso.
Al encuentro en el que también participó el presidente electo, Gustavo Petro y el monseñor Luis Mariano Monteayor, Leyva manifestó que todos los diálogos de paz están en proceso se desarrollarse. De igual manera, aprovechó para hablar sobre el acogimiento del Clan del Golfo y otras organizaciones delictivas.
“Una cosa es sometimiento y otra cosa es el acogimiento donde hay unas propuestas y ellos (las bandas criminales) verán si se acogen o no; es algo diferente. Entonces finalmente se acogen a la terminación del diálogo y se acuerde. Naturalmente eso es algo que está por desarrollarse, no es que haya una partitura”, explicó el canciller.
En cuanto a los posibles diálogos de paz con las disidencias de las Farc, Leyva indicó que el Gobierno entrante buscará una paz total, en la que nadie se quede por fuera.
“Se trata de buscar una paz total, vamos a tratar de que nadie quede por fuera, se busca es la tranquilidad pública, naturalmente la recuperación de las regiones, donde todo esto se manifieste, obviamente hay un eje que está en todos los diálogos atravesado en el país que es el tema del narcotráfico”, explicó Leyva.
Asimismo, el canciller designado habló sobre las relaciones diplomáticas con Venezuela en las que aclaró que no hay una fecha definida para la apertura de la frontera, teniendo en cuenta que falta “normalizar la relación”.
“Se va a hacer, hay que intercambiar embajadores, pero definitivamente se va hacer, hay que normalizar la relación. No se puede continuar en la situación en la que estamos y hay que reactivar el aparato económico, satisfacer las necesidades diarias de una cantidad de gente”, afirmó el canciller.
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